NasoBuco: Realidad o Ficción en Cuba.
Veo los
documentales chinos, japoneses, y de otros países y veo como existe cultura en
el uso del naso-buco. Aclaro para aquellos que no saben qué cosa es el naso-buco,
me remito a decirles que es una banda de tela que cubre la boca y la nariz e
quien lo usa amarrándose las tiras por detrás de la cabeza para evitar contagiar
a los demás de gripe y la tan común tuberculosis (TB) por estos días en Cuba.
Cuba no tiene cultura de usar el naso- buco.
Y si preguntamos a los jóvenes, adolescentes y adultos que cosa es un naso-buco
piensan lamentablemente que uno ofensivamente les mienta a su madre.
Desafortunadamente
quienes más perjudicados están a causa de no promoverse el uso del mismo son
las mismas personas afectadas de VIH-SIDA y otras personas inmunodeprimidas,
porque los medios de comunicación no promueven el uso de esta medida de
bioseguridad tan importante que reduce el riesgo de tantas enfermedades virales y
bacterianas molestas para la población.
Los
cubanos creemos sobre todo, que usar naso-buco en plena calle, faena
laboral, escuelas y colegios, o algún que otro lugar público es temer la
opinión de la mayoría, quienes alegan lo siguiente: “ya que si nadie lo usa para que
usarlo yo”. Y todo por temor a verse y sentirse extrañamente ridículos
a expensas de no cuidar su propia salud.
Cuba, quien se dice tener un programa
para la erradicación y reducción de la tuberculosis (TB), es la que menos
los profesionales
de salud usan por ejemplo el naso buco.
Tampoco
las autoridades
sanitarias exigen la puesta en práctica de las medidas preventivas
exigiendo el autocuidado y el cuidado ciudadano contra enfermedades que atentan
el bienestar
ciudadano; por lo que es necesario argumentar que la ausencia en la
ejecución de este simple y sencillo beneficio, demuestra una vez más que Cuba
en cuestiones de llevar a cabo un plan preventivo contra
epidemias u otras enfermedades altamente contagiosas tiene mi calificación como
paciente seropositivo que soy de cero puntos.
Las personas
seropositivas que viven en este país. Cada día tenemos el reto de
esgrimir las enfermedades con ingenio y astucia sin buscarnos problemas, en
culpa de una pobre educación sanitaria. Por ejemplo, si tomamos cualquier
bus u otro transporte público, y alguien se sienta a nuestro lado (sea la
persona hasta un niño) con la gripe que anda, tenemos que
levantarnos dejar nuestro cómodo asiento evitando ser víctimas de cualquier
tipo de contagio; si vamos a cualquier institución de
salud en nuestro país y en el mismo centro hay pacientes que no usan el naso-buco,
y entre estos profesionales médicos, tenemos que atendernos allí
obligatoriamente para poder recibir un tratamiento; si vamos a un centro
laboral, y en el colectivo nuestro hay alguna persona con la gripe
u alguna otra enfermedad viral, debemos de aguantarla porque no existe
ninguna medida laboral que exima a la persona de ausentarse a su puesto por
cuestiones de salud sin perder su pago salarial del día. Y todo esto debemos
de aguantarlo sin llamar la atención de las personas afectadas o de nuestros
médicos o jefes para evitar caer siempre mal o evitar malas contestas entre
estas injurios y palabras obscenas inmerecidas.
En fin que los
seropositivos en Cuba somos los más afectados en cuestiones de salud todo en culpa
de que a nuestros epidemiólogos y ministro de salud pública de nuestro país no
se le ha ocurrido por iniciativa propia que en nuestras farmacias también debe
de venderse o entregar de manera gratuita naso bucos para la población.
Pero que
se puede decir en materia de prevención por estos días en Cuba
si la noticia que corre por estos días tras bambalinas es que en algunas
provincias y municipios de la capital no hay condones en las farmacias
que vender para actividades sexuales. Y eso que abogamos por la reducción del VIH-SIDA
y otras enfermedades de transmisión sexual.
¿Mi
conclusión? Que Cuba es una casa de locos mientras siga siendo dirigida por
aquellos que no les interesa ni un comino lo que viven sus ciudadanos. @mariojdgonzalez